Se cree que la Hermandad de la Sangre de Cristo proviene de una comunidad de Religiosos, llamados de la Penitencia de Jesús, la cual en el año 1200 se encontraba establecida en Zaragoza.
En el año 1280 se reconoce la existencia de una capilla de la Hermandad de la Sangre de Cristo, ubicada en el convento de San Francisco, antiguo Convento de la Orden de la Penitencia de Jesús, en la que se encontraba expuesta a la veneración de los fieles la imagen de un Santo Cristo.